Como preparar el brócoli y otras crucíferas correctamente
- todoescomer
- 16 jul
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El brócoli puede encontrarse durante todo el año en las tiendas de comestibles y a un precio muy asequible. Es rico en vitamina C, vitamina K, hierro, potasio, calcio, fibra pero sobre todo, al igual que otras crucíferas, nos aporta sulforafano.
El sulforafano es un compuesto producido a partir de la glucofarina cuando al dañarse la planta se activa una enzima denominada mirosinasa ( por ejemplo, al cortarla).
Actúa de forma positiva sobre el funcionamiento del sistema inmunológico y sobre la protección a nivel celular previniendo enfermedades crónicas y neoplasias. Tiene propiedades antioxidantes y anticancerígenas gracias a que estimula el sistema denominado Nrf2 que protege a la célula del daño ocasionado por sustancias nocivas.
Para aprovechar los beneficios que el sulforafano nos ofrece, antes de cocinar el brócoli y cualquier otra crucífera, debemos cortarlo en pedazos pequeños y dejarlo reposar al menos 45 minutos. Tras este espacio de tiempo se puede comer crudo en ensalada, en batidos o cocinado ligeramente al vapor. Las temperaturas altas eliminan el sulforafano.
Otras plantas crucíferas ricas en sulforafano son: coliflor, repollo, coles de Bruselas, kale, berza, nabo, rábano, rúcula, berros de agua, mostaza, romanesco, wasabi, pak choi y bimi.


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